ASTRODINÁMICA
El término “astrodinámica” se emplea para indicar el estudio de un horóscopo desde el punto de vista de cómo las influencias planetarias se atenúan o se intensifican a tenor de las reacciones del nativo en una encarnación determinada. El carácter cíclico de las fuerzas de la naturaleza pone un énfasis periódico en cada influencia planetaria y en casa aspecto, y en la medida en que ese énfasis es aprovechado constructivamente, progresa la transmutación alquímica. En la medida en que los aspectos negativos sean expresados, se agotarán los aspectos positivos y éstos resultarán menos efectivos para el crecimiento. Lo comprenderemos fácilmente si consideramos que ningún ser humano está desgajado jamás de parte alguna de su horóscopo. No existe nada semejante a una suspensión de la influencia planetaria. Incluso el rayo inhibidor y restrictivo de un Saturno afligido severamente no hace sino expresarse en la conciencia de la persona que expía tal clase de karma.
Una aplicación práctica de la astrodinámica puede formularse así: cualquier persona que consulta a un astrólogo con enfoque psicológico lo hace porque tiene “problemas”. Tiene problemas porque ha vivido en sus aspectos negativos. Sin una aproximación dinámica a la interpretación, el estudiante puede caer fácilmente en la confusión de interpretar los trinos y sextiles en la carta del consultante como estáticamente buenos. Un trino o sextil es bueno sólo si se expresa verdaderamente, compensando lo que de destructivo o retrógrado haya en la naturaleza de esa persona. La pobreza, la enfermedad, los impulsos amorosos insatisfechos o distorsionados, los miedos y otras vivencias similares son evidencias de que el nativo no ha llevado a la práctica el impulso de materializar las promesas de sus sextiles o los beneficios de sus trinos, sino que ha expresado sus energías en términos de cuadraturas y oposiciones, desperdiciando así sus potencialidades para el bien en el transcurso de la vida. Una expresión continua de lo negativo resultará en el agotamiento de los impulsos regeneradores y se creará así una atadura más estrecha a la Rueda de la Vida.
En el lenguaje musical, el término “modulación” se emplea para indicar un acorde o pasaje que sirve como puente de una sección a otra en una clave o tonalidad diferente. Este término puede emplearse igualmente, en astrodinámica, para describir el propósito de los aspectos de sextil y oposición. Estos aspectos pueden considerarse puntos de transmutación en una carta cuando los dos planetas en oposición reciben el trino y sextil de un tercer planeta, y cuando un planeta en un sextil recibe la cuadratura de un tercer planeta. En cualquiera de ambos casos, el planeta que forma el buen aspecto representa el camino en el que la persona encuentra la redención de su mal. Así, mediante la aplicación de esa energía planetaria puede lograrse la transmutación y el poder que tienen la cuadratura y la oposición para expresar discordia es atenuado y neutralizado.
Los aspectos arriba descritos representan la forma de alquimia más sencilla. Sin embargo, otros deben ser considerados. Con toda probabilidad, la transmutación de una cuadratura no suavizada es más difícil que cualquier otro tipo de experiencia en la vida. Este término implica dos planetas en cuadratura sin trinos o sextiles a otros planetas. Superficialmente, representa un destino difícil, indicando un problema serio mediante el cual el nativo debe aprender una lección muy necesaria. Puesto que cada uno de los planetas implicados serán activados periódicamente por buenos aspectos en forma de
lunaciones, progresiones lunares, etc., un cierto grado de ayuda está garantizada. Dado que tal aspecto indica la posibilidad de mucho sufrimiento o grandes dificultades, el nativo debe ser instruido en la naturaleza básica y positiva de ambos planetas. Cuando el nativo aprecie una activación de este aspecto, debe esforzarse al máximo por manifestar, aunque sea en un grado limitado, las cualidades positivas de ambos planetas, o al menos de aquel que se está expresando más activamente. Puesto que ambos planetas de la cuadratura están en un mano a mano constante, se afectan considerablemente uno a otro; la negatividad de uno intensifica la negatividad del otro y el mal resultante alimenta más errores en el futuro. Sin embargo, si por disciplina espiritual y/o por transformación psicológica, el nativo sólo consiente la expresión de la vibración positiva de cada planeta, entonces el bien de cada uno estimula al otro, la transmutación tiene lugar y el destino es trascendido a su debido tiempo.
Una aproximación similar puede hacerse respecto a la oposición no atenuada por buenos aspectos, con la excepción de que fusionar los opuestos es más sencillo y menos arduo de poner en práctica que en el caso de la cuadratura. Existe una complementariedad en el aspecto de oposición, de modo que si un planeta se potencia a expensas del otro resulta una condición de desequilibrio, y no de armonía o balance. En otras palabras, la transmutación alquímica demandada por este aspecto es “expresar los asuntos en términos del opuesto” o “en cooperación con el otro”. Lo más importante para el astro-psicólogo es tener presente que en los adultos, con gran frecuencia los aspectos negativos han sido expresados y experimentados durante muchos años y que muchas personas son inconscientes de todo el bien que pueden manifestar y llevar a cabo. La humanidad se acostumbra tanto a sus conflictos, sus miedos, sus malos hábitos, sus frustraciones y sus miserias que la mayoría se aviene a la actitud de “Soy así y no puedo remediarlo”. Todo eso es insensato y erróneo. Existe una solución para cada problema humano que debe ser encontrada, en la medida en que un problema es sólo el resultado de una energía mal enfocada. Así, con el horóscopo iluminando el camino, los medios de solución pueden ser encontrados en el conjunto de los aspectos benéficos de la carta.
El enfoque dinámico de la interpretación astrológica encuentra su aplicación maestra como guía para los niños. El niño o niña recién encarnado viene a unos padres que han tomado sobre sí la responsabilidad sagrada de guiarlo. A buen seguro tienen ideas preconcebidas de lo que les gustaría que fuera pero si desean ser auténticos padres, guiarán al niño de acuerdo con las líneas más beneficiosas para él. Tal ayuda supone mucho más que la vocación paternal, tan importante como ésta es. Significa que ellos mismos deben actuar como agentes neutralizadores de las tendencias negativas indicadas en la carta natal de la criatura. Ninguna madre cuyo hijo tenga a Marte afligiendo a la Luna debería permitirse a sí misma perder la cabeza en presencia del niño. ¿Por qué? Porque cada vez que obra así, potencia esa vibración discordante en el subconsciente del niño, y su irritabilidad instintiva resulta intensificada, una imagen de violencia y crueldad se perfila más profundamente en el patrón vibratorio del niño. Por el contrario, puesto que un niño pequeño reacciona a todo lo que sucede en su entorno, cualquier manifestación de calma, equilibrio, amabilidad y consideración neutraliza, aunque sea en un grado pequeño, el bronco impulso de Marte en cuadratura con la Luna y permite al niño tratar con esos impulsos mucho más fácilmente a medida que crece. En otras palabras: la madre refuerza con su conducta recta un rasgo armónico y constructivo en el niño. Representa, por tanto, lo bueno y no lo malo en su carta y en su vida.
Este material se presenta a la consideración de los estudiantes avanzados y de los médicos astrólogos. Relaciona los factores dinámicos de la transmutación alquímica con el cálculo matemático y la tabulación de los aspectos progresados.
El título deriva de la consideración que en momento alguno un horóscopo deja de actuar. La naturaleza, se ha dicho, tiene horror al vacío; no existe tal cosa como “la nada” en la manifestación. Por analogía, no existe tal cosa como “nada”, vacío o actividad detenida en un horóscopo. Existen, por supuesto, períodos de quietud aparente, actividad ordinaria y una suavidad o monotonía de las influencias. Estas, sin embargo, alcanzan picos de clímax, de intensa experiencia, cambios manifestados drásticamente o atenuaciones significativas.
El propósito del enfoque astrodinámico es el estudio de los aspectos progresados o los ciclos, partiendo de que representan la estimulación no sólo de un planeta a la vez sino de un área completa del horóscopo.
La naturaleza de la vibración planetaria permite un campo de influencia que llamamos orbe. Esta influencia a ambos lados de la posición exacta de un planeta le permite “darse la mano” con los otros planetas a los que aspecta. Así, la vida del horóscopo es activada.
De ordinario, en la preparación de un análisis astrológico listamos los aspectos progresados para el año en curso o tal vez para el siguiente también, con el propósito de identificar las fuentes principales de experiencia de la persona en ese tiempo. En la astrodinámica procedemos igual, salvo que listamos los aspectos progresados por grupos o áreas. Esta aproximación es la que indica más claramente las posibilidades de los procesos alquímicos. Contrastamos los aspectos positivos y los aspectos negativos que están siendo estimulados al unísono o secuencialmente y, por consiguiente, determinamos qué recursos están disponibles para la regeneración de las emociones y para la reorientación de las respuestas.
Cualquier cálculo matemático adicional que implique este tipo de análisis queda compensado sobradamente por la presentación vital y palpitante de los aspectos progresados involucrados. El horóscopo entero toma una dimensión adicional, de un cuadro bidimensional sobre un papel pasa a ser una representación estimulante de algo vivo.
Veamos: un varón requiere su ayuda por un problema matrimonial. Usted levanta tanto su carta como la de su esposa, tabula los aspectos de ambos y presta atención particular a las conjunciones mutuas. Estas conjunciones mutuas forman la base del análisis de los problemas.
En su carta, encuentra a Piscis en el Ascendente; Mercurio regente de la casa séptima, se encuentra en 9º de Acuario, en la casa undécima. Marte se encuentra en 12º de Escorpio, casa octava, en cuadratura con Mercurio. Encontramos a continuación una conjunción mutua que liga ambas cartas. El Marte de ella está en 10º de Acuario, en conjunción con el Mercurio de él, en cuadratura con la Luna en Tauro, la cual a su vez está en oposición al Marte del varón en Escorpio. La conjunción del Marte de ella con el regente de la séptima casa de él es la llave de una situación marital difícil, caracterizada por la vibración de un Marte no regenerado. El agente alquímico es para él su Venus no afligido, sextil a Mercurio. Colocando todos estos planetas en una carta en blanco se puede comprender mejor el cuadro.
Al tabular las progresiones actuales de él, vemos que desde la Fecha del Cálculo Ajustado (FCA) previa, hasta la siguiente, la Luna se desplaza 13º 38’. La división de esos grados por doce muestra una progresión mensual de un grado y ocho minutos. La FCA es el día quince del mes. La Luna se desplaza treinta y cuatro minutos en cada quincena.
Al tabular mensualmente las posiciones de la Luna progresada para este período de un año, desde el día quince de cada mes, se aprecia que durante las dos últimas semanas de marzo de 1947, la Luna progresada está en conjunción exacta con Mercurio. A primeros de Junio forma una cuadratura con Marte. A primeros de agosto forma un sextil con Venus, siempre en el horóscopo de él. Tabule esos aspectos y fechas a pie de página. Póngalos entre paréntesis para recordar que estamos ante un conjunto de influencias.
La cuadratura Mercurio-Marte muestra que desde fines de marzo hasta primeros de junio, el problema matrimonial sufrirá una estimulación apreciable. Puesto que en este ejemplo usted trata con el varón, no es especialmente necesario concentrarse más en la carta de la mujer. Son las reacciones de él las que nos preocupan. Cualquier cosa que la mujer pueda hacer durante esos meses será vivida a través de los aspectos de él. Sin embargo, en la conjunción con Mercurio, el sextil a Venus empieza a vibrar simultáneamente a la cuadratura a Marte, ya que Venus está en órbita de sextil en la carta natal. Por consiguiente, Venus es el agente alquímico que este hombre debe emplear durante ese período de poco más de cuatro meses. Él debe contrarrestar la vibración de Marte, muy fuerte en Escorpio, con el principio de la vibración venusina. Esa es su panacea en ese momento. Empleándola persistentemente durante este tiempo de dificultades, conseguirá un gran crecimiento del alma y a medida que su experiencia matrimonial progresa será más capaz de encaminar su conducta constructivamente.
Una breve consideración sobre lo anterior: suponga que el hombre y su esposa le consultan conjuntamente. Ambos tienen interés en aprender a armonizar su experiencia matrimonial. Entonces, usted combinará los datos de ambas cartas y encontrará que ella tiene a Saturno libre de aflicciones en Géminis, trino a su Marte en Acuario y sextil al Venus sin aflicciones de él. En este caso, tabule los aspectos progresados para los mismos meses que antes y por grupos de aspectos. Cada persona activa la vibración negativa de Marte en su pareja. Pero cada uno de ellos tiene un agente alquímico con el que trabajar. En la comprensión que cada uno debe emplear una cierta vibración constructiva para neutralizar la discordia y generar armonía, ambos pueden encarar el tiempo venidero con mayor confianza en una ayuda mutua y, en consecuencia, mayor felicidad conyugal. Ella debe contrarrestar una disposición violenta (Marte en cuadratura con la Luna), con la paciencia y equilibrio de Saturno en Géminis. Él debe transmutar la tendencia a la discordia mental profundizando siempre en el afecto y derramando amor. Cada uno tiene que afrontar un patrón vibratorio mas siendo una pareja, un crecimiento y una alquimia conjuntos pueden lograrse.
La anterior es una ilustración simple y directa de este enfoque. Sin embargo, el procedimiento es el mismo para cualquier grado de complejidad de aspectos progresados. Los principios de la alquimia y la transmutación exigen que busquemos solución al problema, pero si consideramos cada aspecto progresado como algo que termina en sí mismo, las soluciones pueden no ser tan evidentes. Enlace los grupos de aspectos en sus tabulaciones como causas. Los efectos y las soluciones se manifestarán mucho más claramente.